Por Javier Ramírez
CO-Founder y Director de We.Do Cowork
Ingeniero Civil Industrial – MBA
La contabilidad aporta información económica sobre una empresa, tanto para facilitar su control, como para tomar decisiones que propicien crecimiento para el negocio. Los nuevos modelos de negocios donde los emprendimientos y startups han ganado terreno, ha provocado el surgimiento de modelos de contabilidad más evolucionados.
La contabilidad tradicional, circunscrita a declaración de IVA, pago de renta y remuneraciones, por nombrar las actividades más conocidas, cumple con lo establecido legalmente para toda empresa y permite tener un orden tributario y financiero que exige el sistema económico. Es un lenguaje universal necesario y fundamental para el buen funcionamiento.
En complemento a lo anterior, existe una contabilidad para la gestión que permite entender determinados costos de un producto o servicio y su rentabilidad, con el objetivo de tomar decisiones respecto a tarifas y producción. Es una gestión en torno a una determinada área del negocio a partir de la extracción de información útil de la contabilidad.
Para esto se requiere una estructura de contabilidad que ordene la información de determinada forma, con estructura de centros de costos y planes de cuentas, junto a un ordenamiento administrativo para que las personas a cargo registren adecuadamente la información y se procese en indicadores y parámetros.
Esto no es una exigencia. Es una nueva forma de contabilidad que combina las tareas tradicionales, con las de gestión, y que aporta al emprendedor en la optimización de sus recursos y toma de decisiones de valor de sus productos y servicios.
Este tipo de contabilidad es la que WE.DO Cowork comenzará a implementar en apoyo a nuestros coworkers y todos los emprendedores del ecosistema local que lo requieran. Buscamos que los emprendedores sean profesionales en el manejo de sus negocios para que sepan dónde poner el foco y escalar.